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12 marzo 2013
En AVE al Centro del Mundo
11 de Marzo, 2013 11:43h.

Dalí afirmaba que el 19 de septiembre de 1963 había tenido una visión al entrar en la Estación de Perpiñán : "De pronto, todo me pareció muy claro: me encontraba en el Centro del Mundo".

Cincuenta años más tarde he ido a comprobarlo, aprovechando que desde hace unas semanas se puede viajar desde Madrid a Perpignan en AVE, en algo más de cuatro horas. Hasta finales de abril hay que hacer cambio en la estación de Figueres-Vilafant lo cual brinda la ocasión perfecta para redescubrir la ciudad donde nació y murió Salvador Dalí.

Como buen mitómano buceo por el casco antiguo de la capital del Alto Ampurdan buscando la huella de este artista tan genial como controvertido. Quien desee alojarse en su hotel favorito, lo puede hacer incluso en la habitación que siempre utilizaba. Sólo hay que tener suerte y conseguir que la 101 del Hotel Duran esté libre o la 102 donde solía dormir Gala. La decoración ha cambiado pero el espacio es el mismo. En cambio el Celler del hotel (Ca la Teta) donde le gustaba comer y cenar está exactamente igual, como se puede comprobar en las muchas fotografías que cuelgan de las paredes.

En Figueres no se les ha ocurrido todavía crear una ruta específica sobre Dali pero cualquiera puede inventarse la suya propia. Por si alguien no tiene tiempo de investigar, dentro de unos días publicaré la mía. Pero de todas formas les sugiero que siempre se dejen sorprender por esta ciudad llena de secretos y festivales como el dedicado al Circo con el que coincidí hace unos días.

A Perpignan sólo se tardan veinte minutos en tren de alta velocidad desde Figueres. Y no cabe duda que sigue siendo el Centro del Mundo por lo menos para los aficionados al arte. En la parte antigua de la estación todo está igual, tal como lo conoció Dali, incluidas muchas fotos curiosas de su paso por ella. En la parte nueva, se ha creado el Centre del Mon, un flamante y multicolor Centro Comercial que incluye un hotel con ese nombre. Se echa de menos sin embargo una reprodución de la obra que pintó en 1965 tras su apocalíptica visión dos años antes. Para ver el original que tituló Gala contemplando a Dalí en estado de ingravidez sobre su obra de arte 'Pop, Op, Yes, Yes, Pompier' hay que viajar hasta el Museo Ludwig de Colonia.

Como ocurre en Figueres, en Perpignan también hay un hotel 100% daliniano, el Hotel de France, justo en frente del Castellet, el edificio más carismático de la capital del Rosellón. Este todavía acogedor hotelito con encanto era su cuartel general y el lugar donde descansaba antes de emprender viaje hacia Paris, Montecarlo o Nueva York desde su aeropuerto o después de ser recibido con todo tipo de honores por las autoridades locales. Pero también desde donde dirigía los movimientos y el transporte de su obra por el mundo.

Ahora la gran atracción de Perpignan es el Theatre de l'Archipel, una obra de un Jean Nouvel en estado de gracia que a Dalí le hubiera encantado. Esta compuesto por varios edificios muy distintos entre si, alrededor de un gigantesco granate que alberga el auditorio principal. Coincido con una espectacular representación en ocho horas con intermedio gastronómico del Enrique VI de Shakespeare, en versión de Thomas Jolly. Sólo por disfrutar de una representación en este inusitado teatro ya valdría la pena venir a Perpignan.

Tampoco hay que perderse escuchar el carrillón de su Catedral, el más antiguo y complejo de Francia, sobre todo cuando lo toca Laurent Pie. Hay conciertos los fines de semana pero también en fechas especiales o durante el Festival Internacional. El interior del edificio está cuajado de obras de arte incluido el monumento funerario dedicado a Sancho de Mallorca, recordándonos que el Rosellón formó parte durante unos años, durante los siglos XIII y XIV, de aquel efímero reino.

Por el momento, sólo se puede adquirir por internet a través de RENFE un billete para el tramo hasta Figueres. Para Perpignan y el resto de Francia, lo mejor es contactar Rail Europe que se ocupa de distribuir en España los productos ferroviarios de la SNCF (ferrocarriles franceses).