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7 enero 2016

GALLUR

 
 

La DGA pedirá refuerzos a Renfe para afrontar las obras en la N-232

Quiere aumentar la frecuencia de trenes para evitar atascos en la carretera

 

Un tren de viajeros se aproxima a la estación de tren de Gallur. - Foto:EL PERIÓDICO

Un tren de viajeros se aproxima a la estación de tren de Gallur. - Foto:EL PERIÓDICO

 

F. V. 04/01/2016

El tramo de la N-232 entre Figueruelas y el límite con Navarra está habitualmente congestionado. Y todavía lo estará más a partir de este año o, con mayor probabilidad, a partir del 2017, cuando se espera que empiecen en serio las obras para desdoblar los 14 kilómetros comprendidos entre la fábrica de General Motors y Gallur.

El trazado de la futura autovía A-68 calca prácticamente el de la actual carretera, por lo que los trabajos interferirán en el tráfico y generarán una saturación todavía mayor que la que existe en la actualidad.

 

REUNIÓN Por este motivo, el consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda de la DGA, José Luis Soro, ha anunciado que abordará con Renfe y el Estado la mejora del servicio de ferrocarril entre Zaragoza y Gallur con el objetivo reducir el número de vehículos que circulan a diario por la N-232.

El Gobierno de Aragón se propone aumentar la frecuencia de trenes y adaptarla a las necesidades de los usuarios, principalmente trabajadores, estudiantes y pacientes que se desplazan a los centros de salud de Zaragoza. La zona afectada de la N-232 recorre el eje del Ebro al oeste de la capital aragonesa, donde se concentran numerosas industrias que generan un importante flujo de viajeros y mercancías los días laborables.

En este sentido, el primer paso hacia el refuerzo de la línea de Zaragoza a Logroño y Pamplona podría darse el próximo 11 de enero, cuando está prevista una reunión de la comisión bilateral en la que participan Aragón y Renfe y que es el foro donde se abordan los cambios en la política ferroviaria. En la reunión estarán presentes el presidente de Renfe y José Luis Soro.

En la actualidad, 82 trenes circulan cada semana por la citada línea, pero muy pocos de ellos, entre cuatro y cinco diarios, se detienen en Gallur y en otras estaciones intermedias.

"Las mejoras se introducirán cuando las obras empiecen en serio", señalaron en el Departamento de Movilidad. Una fecha que nadie se atreve a adelantar, pues, por un lado, la partida presupuestaria para el 2016 es muy baja, de solo 4,3 millones de un coste total de 47,3. Y, por otro, el Gobierno del PP aceleró al final de la pasada legislatura la tramitación para el trazado completo entre Zaragoza y Navarra, una medida en la que los partidos de la oposición vieron vieron una intención más electoralista más que un compromiso formal.

Con todo, la posibilidad de que los movimientos de tierras puedan empezar sin que no se hayan previsto alternativas preocupa en los municipios situados junto a la autovía de Logroño y la N-232. "El servicio de trenes actual es claramente deficiente y nos da miedo que el tráfico de la carretera se bloquee con las obras más de lo que ya lo está", denunció Yolanda Salvatierra, alcaldesa de Gallur.

La regidora subrayó que el ferrocarril es el mejor medio para garantizar el transporte de viajeros. "Pero se utiliza muy poco porque hay pocos trenes, cuatro o cinco diarios, y los horarios no son buenos", advirtió.

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