Jungfrau, la estación de trenes más alta de Europa
Un viaje a Suiza nos sorprende con la cantidad de sitios y paisajes únicos en tan pequeña porción de tierra europea. Como bien nos contaba Lola hace tiempo ya ( buscando en los archivos de Diario del Viajero encontramos cosas interesantísimas ) los alpes suizos tienen muchos records.
Uno de ellos lo ostenta Jungfrau , la estación de trenes más alta de Europa. Algunos datos nos darán una mejor idea de este lugar único.
Cada año aproximadamente 500.000 turistas tomar el tren para llegar desde la base del Glaciar Eiger a 2.060 metros sobre el nivel del mar hasta a plataforma de observación de Jungfrau a 4.158 metros de altura.
Aproximadamente el 60% de esos visitantes son asiáticos, principalmente japoneses, coreanos, indios y chinos.
El año pasado se rompió el record de visitas: 702.000 y se espera llegar al millón para el 2010.
Este tramo del ferrocarril tiene 9.3 kílómetros de largo y fue construido entre 1896 y 1912.
Los viajeros que hacen este viaje, reciben un billete “vintage“ similarel bilete que se entregaba hace 50 años.
La ruta comienza al aire libre para internarse poco mas tarde un largo túnel. La primer parada es Eigergletscher a 2.320 metros sobre el nivel del mar.
Se continúa dentro de la montaña hacia la próxima estación, Eigerwand a 2.850 metros (foto). En esta estación hay unas ventanas panorámicas que permiten tener vistas asombrosas desde aquela altura.
Después de una corta parada, el tren sigue camino hacia Eismeer con otro punto panorámico donde los visitantes suelen sacarse la típica instantánea con los Alpes de fondo.
La próxima y última parada es la más esperada; Jungfrau a 3,454 metros de altura. Aquí la estación incluye restaurantes, observatorio y el Ice Palace un complejo de túneles, esculturas y salas cavados en el hielo de la montaña.
Hay un ascensor que lleva a los turistas a altísima velocidad (6,3 metros por segundo) a unos 108 metros más arriba, al observatorio Sphinx (en a foto del inicio se ve por encima de la estación)
Como detalle: aquí se encuentra la oficina de correos más alta de Suiza que se cansa de sellar tarjetas postales, billetes, agendas o diarios de viaje para llevarse a casa el recuerdo de haber visitado el techo de Europa.