REDACCIÓN - PONTEVEDRA Los vecinos de la calle Médico Ballina en Lérez se llevaron ayer un susto enorme. Ocurrió sobre las tres de la tarde como consecuencia de un error de cálculo en las explosiones que se llevan a cabo para realizar el túnel de la línea del AVE. Tras una detonación que "sonó igual que un terremoto", los vecinos comprobaron como una lluvia de cascotes y gravilla comenzó a caer sobre los tejados de casas y edificios situados en un radio de 150 metros alrededor del punto en el que se están llevando a cabo los trabajos.

El sobresalto fue mayúsculo también para algunos conductores que circulaban por la avenida de Compostela y la calle Médico Ballina. De hecho, algunos cascotes dañaron dos vehículos que circulaban por la zona.

Daños en los tejados

A última hora de la tarde de ayer todavía se estaban inspeccionando las viviendas de la zona. En principio, se habían detectado desperfectos en tres edificios en los que los cascotes habían causado daños en los tejados, según fuentes de la Policía Local de Pontevedra.En la zona, testigos presenciales indicaron que alguna ventana de carpintería de aluminio también había resultado dañada.

A última hora de la tarde de ayer todavía se seguían inspeccionando las viviendas que se encuentran en el radio al que afectó la explosión para averiguar si había más inmuebles que pudieran estar afectados.En principio, no hay constancia de que los daños fueran de excesiva gravedad. Tampoco hay que lamentar heridos.

En principio, todo apunta a que la detonación causó estos daños debido a un error de cálculo en la cubierta de protección de la explosión, según indicaron desde Jefatura.