Tres centrales -CC OO, CGT y el Sindicato Ferroviario- ya han pedido que se reúna la comisión de conflictos de Renfe, paso obligado antes de formalizar los paros. El encuentro tendrá lugar a principios de la semana próxima y no esperan que la compañía les ofrezca una negociación «seria» sobre el «creciente riesgo» de que se implante en España un modelo «fracasado» y de «peor servicio» como el británico, y se busque «ante todo» privatizar «sin valorar otros costes».

Una de las principales peticiones sindicales es que Renfe y ADIF, el gestor de las infraestructuras ferroviarias, se fusionen o, al menos, no se divida a la primera en varias filiales de un mismo 'holding'. A este respecto, esgrimen que se van a externalizar servicios rentables como la fibra óptica o el mantenimiento de las líneas de alta tensión y las subestaciones. También reivindican que se retome la negociación sobre la salida forzosa (vía ERE) de 500 de los 14.900 empleados de la operadora, cuyas bajas no está previsto sustituir a medio plazo.

Todos los sindicatos con representación en Renfe se reunieron el miércoles en pos de mantener la unidad de acción, aunque no se llegó a un primer acuerdo sobre las fechas de los paros. En esta tesitura, y ante la reunión que mantendrán el día 9 con la ministra, desde el Sindicato Ferroviario y UGT_han decidido acudir a la cita con la huelga ya formalizada ante la «nula voluntad negociadora» de Fomento. «Dicen que quieren dialogar -explicaron este jueves sus representantes-, pero luego toman las decisiones a golpe de decreto (el Consejo de Ministros aprobó hace una semana la división de Renfe) y sólo nos informan».